Translate

miércoles, 8 de julio de 2015

Portada


UNIVERSIDAD ESTATAL A DISTANCIA
ESCUELA DE CIENCIAS EXACTAS Y NATURALES
CENTRO UNIVERSITARIO
SAN CARLOS


CARRERA UNIVERSITARIA
PROFESORADO, BACHILLERATO Y LICENCIATURA EN LA ENSEÑANZA DE LAS CIENCIAS NATURALES

CURSO
FÍSICA MODERNA

CÓDIGO
03182


TÍTULO DEL TRABAJO
LAS FUERZAS FUNDAMENTALES DE LA NATURALEZA Y SU PARTÍCULA MEDIADORA


ALUMNO
a- LILLIAM MARÍA ARAYA ALFARO
b- MAYCOL CARVAJAL MORERA
c- RANDALL ARCE BRICEÑO

CÉDULA
a- 203270857
b- 205750682
c- 206560994

PROFESOR
FERNANDO UREÑA ELIZONDO

FECHA DE ENTREGA
13/07/2015

Introducción

       A menudo utilizamos la frase “fuerza de voluntad” pero en realidad al usarla, ¿estaremos realmente pensando en el concepto de fuerza?  Generalmente hacemos comparaciones sobre quién tiene más fuerza, los niños juegan de manos muchas veces con el afán de demostrar su mayor fuerza, los animales muchas veces luchan y vemos que gana el de mayor fuerza. Por otro lado nuestro entorno y quehacer cotidiano nos muestra un sinfín de situaciones en las cuales este parámetro está presente, por ejemplo los huracanes que generan vientos que derriban árboles y casas, cuando partimos un pastel hacemos una fuerza sobre el cuchillo, cuando caminamos hacemos fuerza sobre el suelo, se podrían mencionar muchos más ejemplos en los que se generan o aplican fuerzas.

       Sin embargo los ejemplos mencionados ocurren en cuerpos que están formados por un gran número de átomos, pero hoy sabemos que uno de los grandes logros de las últimas décadas ha sido descubrir la acción de dichas fuerzas pero a un nivel atómico, o sea entre los componentes básicos de la materia. En documento electrónico publicado por el grupo de altas tecnologías UCM, se cita que:

Tenemos la creencia de que en la naturaleza existe una gran variedad de fuerzas, pero no es así, cualquiera de las fuerzas que nos encontramos, cuando uno desciende hasta los niveles microscópicos ha de ser debida solamente a cuatro tipos de interacciones entre los átomos:
i) Fuerza Gravitatoria.
ii) Fuerza Electromagnética
iii) Fuerza nuclear fuerte.
iv) Fuerza nuclear débil.  

    Además señala dicho documento: "Dos de ellas las conocemos por la experiencia cotidiana, las otras dos implican interacciones entre partículas subatómicas que no podemos observar directamente con nuestros sentidos”.  


    También señala el artículo antes mencionado que cada una de estas cuatro fuerza fundamentales de la naturaleza deben tener su propia partícula mediadora, indica que la fuerza gravitatoria debe una partícula llamada gravitón, que aún no se conoce; para la fuerza electromagnética su partícula es el fotón, para la nuclear fuerte su partícula mediadora es llamada Gluón y para la fuerza nuclear débil sus partículas mediadoras son conocidas como bosones débiles.


      Hoy día gracias a los descubrimientos de muchos científicos se sabe que el átomo está conformado por muchas partículas subatómicas, que además de protones, electrones y neutrones. También están los mesones, leptones, quarks, gluones y bosones entre muchos otros.

Interacción Gravitatoria

Durante millones de años la gravedad fue dando forma a nuestro universo. Los planetas, las estrellas, las galaxias y todo cuanto hay en el cosmos no existiría si la gravedad no hubiese intervenido en su formación. La interacción gravitatoria mantiene unido el universo, crea y deshace los gigantescos cuerpos celestes, y también dirige su paseo cósmico. Sin la interacción gravitatoria, la vida tal y como la conocemos no habría aparecido en ningún lugar del universo.

Imagen N°1. Influencia de la gravedad en la evolución estelar.
De acuerdo con Sears, et al. (2009), la gravitación fue la primera de las cuatro clases de interacciones que vemos en la naturaleza en ser ampliamente estudiada por el hombre. Su estudio surge a partir de las grandes interrogantes que se formulaba la gente común sobre el firmamento. ¿Qué sostiene la Tierra? ¿Por qué no se cae la Luna? ¿Por qué se mueven los planetas y las estrellas? Las respuestas a tales preguntas conducen inevitablemente al estudio de la interacción gravitatoria.

   Isaac Newton, partiendo de los descubrimientos de sus predecesores, fue el primero en proponer en su obra Philosophiae Naturalis Principia Mathematica una teoría general de la gravitación sobre una base experimental y matemática. Para el físico y matemático inglés, la gravedad es una fuerza atractiva que obliga a los planetas a describir órbitas alrededor del sol, el alcance de la fuerza es infinito pero su magnitud decae con la distancia entre los cuerpos. En la teoría newtoniana de la gravitación, la fuerza se calcula respecto del centro de gravedad de dos cuerpos y es directamente proporcional al producto de las masas, e inversamente proporcional al cuadrado de la distancia que los separa.

Imagen N° 2. Ley de gravitación universal de Newton
 Posteriormente el físico alemán Albert Einstein anuncia que la teoría newtoniana está incompleta y por ende es incapaz de describir con exactitud los efectos de la gravedad en el universo. En su teoría de la relatividad general explica que la gravedad es una consecuencia de la geometría del espacio-tiempo, de este modo el Sol deforma el espacio-tiempo de su entorno, de manera que el propio espacio empuja a los planetas hacia la estrella. El espacio-tiempo es dinámico y es deformado por la masa de los cuerpos. El empuje gravitatorio es simplemente una ilusión creada por la deformación de la geometría del espacio-tiempo por efecto de un cuerpo masivo, es decir que “en la teoría general de la relatividad, las propiedades geométricas del espacio se ven afectadas por la presencia de materia” (Sears, et al., 2009, p. 1296). Esta teoría ha pasado con éxito varias pruebas experimentales allí donde las predicciones de la mecánica newtoniana fracasan (Tipler y Mosca, 2015).

Imagen N° 3. Deformación de la geometría del espacio-tiempo.

Sin embargo aunque la teoría de la relatividad general explica satisfactoriamente cómo funciona la gravedad a gran escala, presenta un gran problema. Según acortamos las distancias, la fuerza gravitatoria crece y, dado que actúa sobre sí misma, aumenta hasta hacerse infinita, por lo cual la teoría de Einstein es incapaz de describir el espacio-tiempo. De acuerdo con Moreno (2013):

“Hay situaciones en las que la Relatividad propone la existencia de una singularidad, un punto de curvatura y densidad infinita en el que la teoría pierde cualquier capacidad de predecir. La física simplemente se detiene ahí” (párr. 2).

     En la actualidad los físicos consideran que la teoría de Einstein de la gravitación es una teoría incompleta, ya que resulta lógico que a distancias pequeñas la relatividad general tiene que ser reemplazada por otra teoría alternativa que describa tanto el mundo macroscópico como ese diminuto universo de manera satisfactoria. La teoría se vuelve inútil al no poder realizar predicciones.

     La mecánica cuántica es una teoría tan altamente exitosa como la relatividad general y han sido numerosos los esfuerzos de los científicos en conseguir una teoría cuántica de la gravedad. Hasta la fecha mediante la teoría cuántica de campos se ha logrado describir tres de las cuatro fuerzas fundamentales de la naturaleza. La gravedad por el momento no está al alcance de la teoría. Al aplicarle el mismo tratamiento matemático que a las demás interacciones fundamentales no se obtienen resultados finitos, pero otros modelos que se derivan de la mecánica cuántica se postulan como posibles candidatas a una teoría cuántica de la gravedad, por citar tan solo dos ejemplos se tienen la Teoría Cuántica de Lazos (Loop Quantum Gravity o LQG) y la Gravedad Cuántica de Einstein (Quantum Einstein gravity) de Martin Reuter (Moreno, 2013).

    El problema con las teorías candidatas a convertirse en la futura teoría cuántica de la gravedad capaz de hacer desaparecer singularidades y objetos similares, es que las energías y condiciones en las cuales se considera que la gravedad cuántica es importante son actualmente inaccesibles a los experimentos de laboratorio. Como consecuencia no se disponen de resultados y observaciones experimentales que brinden alguna indicación de cual predicción es la correcta.

   Según Moreno (2013), las teorías cuánticas señalan que el campo gravitatorio debe manifestarse en "cuantos" o partículas bosónicas transmisoras de la interacción gravitatoria. A esta partícula hipotética o bosón gauge se le denomina gravitón. Los experimentos realizados hasta la fecha aún no han encontrado evidencia de la existencia del gravitón dado que estas partículas portarían muy poca energía, pero se estima que debe ser un bosón de espín 2, sin carga eléctrica y con una masa nula o prácticamente insignificante. La interacción de las partículas materiales con los bosones gauge que producen los campos de fuerza se interpreta en términos de emisión o absorción de estos cuantos, sin embargo a diferencia de las otras partículas mediadoras los gravitones también podrían interactuar entre ellos. En el siguiente vídeo se brindan más propiedades del gravitón:



         El estudio de la interacción gravitatoria resulta de gran importancia para la humanidad al ser esta una fuerza vinculada a todas las actividades que ocurren en el universo. Es una fuerza sorprendente que gobierna el universo trabajando a grandes y pequeñas escalas; nada escapa a su influencia. Por tal motivo un mayor entendimiento de este “pegamento cósmico” conducirá a nuevos y fascinantes descubrimientos e inventos que beneficiarán a toda la humanidad.

Interacción Electromagnética

     Es una de las cuatro fuerzas fundamentales, que se manifiesta a través de las fuerzas entre las cargas (Ley de Coulomb), y la fuerza magnética, las cuales, se resumen en la ley de la fuerza de Lorentz. Fundamentalmente, las dos fuerzas magnética y eléctrica, son manifestaciones de una fuerza de intercambio que implica el intercambio de fotones. El enfoque cuántico de la fuerza electromagnética, se denomina electrodinámica cuántica o QED. La fuerza electromagnética es una fuerza de rango infinito que obedece a la ley de la inversa del cuadrado, y es de la misma forma que la fuerza de la gravedad.

     Las fuerzas electromagnéticas son experimentadas por partículas con carga eléctrica. Son las que mantienen los electrones ligados al núcleo atómico y también las que originan las fuerzas existentes entre átomos o moléculas, que no son otra cosa que el resultado de las atracciones eléctricas entre los electrones y núcleos que los componen. Son por lo tanto responsables de todos los fenómenos químicos y de casi todos los fenómenos cotidianos, con excepción de la gravedad. Determinan, por ejemplo, si una sustancia es sólida, líquida o gaseosa a una cierta presión y temperatura, y si un cierto material es duro o blando. Todos los fenómenos biológicos son también originados en última instancia por fuerzas electromagnéticas. Además, claro está, son responsables de los relámpagos, de las fuerzas entre imanes y de la energía eléctrica que utilizamos diariamente.

     La fuerza electromagnética mantiene unidos a los átomos y las moléculas. De hecho, las fuerzas de atracción y repulsión eléctrica de las cargas eléctricas son tan dominantes sobre las otras tres fuerzas fundamentales, que estas pueden ser consideradas como insignificantes en la determinación de la estructura atómica y molecular. Incluso los efectos magnéticos suelen ser evidentes sólo a altas resoluciones, y actúan como pequeñas correcciones. Vídeo breve acerca de la fuerza electromagnética: 



     El fotón es el nombre dado a un cuanto de luz o de otra radiación electromagnética. La energía del fotón se da en la fórmula de Planck. El fotón es la partícula de intercambio responsable de la fuerza electromagnética. El rango infinito de la fuerza electromagnética, se debe a la masa en reposo cero, del fotón. Aunque que el fotón tiene masa en reposo cero, tiene un momento finito, exhibe deflexión por un campo de gravedad, y puede ejercer una fuerza.

    El fotón tiene un momento angular intrínseco o "espín" de 1, por lo que las transiciones electrónicas que emiten un fotón, deben dar lugar a un cambio neto de 1 en el momento angular del sistema. Esta es una de las "reglas de selección" para las transiciones de electrones.

Interacción Nuclear Débil

       La fuerza nuclear débil es una interacción que forma parte de las cuatro fuerzas fundamentales de la naturaleza. En el modelo estándar de la física de partículas, ésta se debe al intercambio de los bosones W y Z, que son muy fuertes. El efecto más interacción que representa, es más fuerte que la gravitación a cortas distancias.

         Según Torres (2007), un protón se puede convertir en un neutrón, además señala que, en el sol este proceso ocurre muchísimas veces cada segundo, pero se pregunta el autor, “¿cómo puede ocurrir esto?”, ante dicha pregunta él mismo responde lo siguiente:

Para entender mejor cómo un protón (que tiene carga eléctrica positiva) se convierte en un neutrón (que no tiene carga) conviene examinar los quarks que componen al protón y al neutrón. Un protón está hecho de 2 quarks de tipo U y 1 quark de tipo D. Un neutrón está hecho de 1 quark de tipo U y 2 quarks de tipo D.

      Para ilustrar la diferencia entre el protón y el neutrón, se transcribe la representación que hace Torres:


ImagenN° 1. Protón y Neutrón.
Imagen N° 2. Protón y Mesón pi.

       Continúa Torres con la pregunta: ¿Cuál es la diferencia entre el protón y el neutrón?, a lo que él mismo añade la siguiente respuesta:

                Basta con cambiar un quark tipo U a uno tipo D. Pues justamente esto es lo                           que ocurre en la naturaleza cuando entra en acción la fuerza nuclear débil.                            Un quark tipo U cambia a uno tipo D por medio de la interacción débil.

      También podemos ver un vídeo explicativo de la fuerza nuclear fuerte y débil, en el siguiente enlace:

       Barranco y Mondragón señalan que la pregunta: ¿de qué está hecho el universo? no se podía resolver de manera general. Se tuvieron que invertir incontables horas de trabajo donde colaboraron una larguísima serie de científicos que incluye a Dalton, Mendeleiev, Rutherford, Thomson, Einstein, Bohr, Dirac, Schrödinger, Heisenberg, Feynman, Fermi, Gell-Mann, Glashow, Salam, Weinberg, Lederman, Higgs, Yang, Mills y muchos más, antes de poder contestarla. Ahora se tiene una teoría, conocida como el ME, que es capaz de abordar a la pregunta general y lo que es más, esa teoría es capaz de hacer predicciones con una precisión de 1 en 100 mil millones. Sin entrar en detalles técnicos, de acuerdo al ME, la materia está constituida por partículas elementales, es decir, hasta las escalas de energía alcanzada por los aceleradores actuales, partículas indivisibles y sin estructura interna. Estas partículas elementales se dividen en quarks, leptones y bosones intermediarios (p. 5).

       Finalmente hay doce bosones intermediarios que son los responsables de transmitir las interacciones fundamentales (sin incluir a la gravedad) entre los quarks y los leptones. Existen cuatro interacciones fundamentales de la naturaleza que actúan sobre los quarks y los leptones:

1. La fuerza fuerte que, entre otras cosas, mantiene a los quarks unidos para que formen a los protones y a los neutrones. Los bosones responsables de transmitir esta interacción son 8 gluones.

2. La débil, que es la responsable del decaimiento de los núcleos. Los bosones asociados son los bosones w (uno positivo y su antipartícula que es negativa) y un bosón neutro llamado z.

3. La electromagnética producida por el intercambio de fotones.

4. La gravitacional. A este nivel la gravedad no juega un rol importante y es por ello que puede ser despreciada sin pérdida de generalidad. 

       Para comprender mejor este asunto de los bosones podemos recurrir a la comparación que hacen Barranco y Mondragón:


Sin entrar en mucho detalle, él ME es una teoría cuántica de campos que describe las interacciones entre los leptones y los quarks a través del intercambio de bosones intermediarios. Una imagen caricaturizada es la siguiente: imaginemos que vemos a dos tenistas desde una altura considerable. Observamos que ambos jugadores se mueven de manera muy curiosa y al parecer sin ningún orden. Sin embargo, a medida que nos acercamos a los jugadores veremos que entre ellos intercambian una pelota, que es la responsable de que se muevan de la manera que vimos anteriormente. De forma similar, las partículas elementales interactúan intercambiando una partícula entre ellas a la cual llamamos bosón intermediario. Para la interacción fuerte, por ejemplo, los intermediarios son los gluones (del inglés glue: pegamento), para la fuerza débil son los bosones w y el z y para la electromagnética el fotón. Siguiendo con la analogía, nuestros tenistas se pueden agrupar a su vez en dos bandos: los hadrones y los leptones. Los primeros son principalmente sensibles a la interacción fuerte, y los leptones a la débil (p. 6 ).

       La comparación de Barranco y Mondragón continúa explicando que:


Este modelo que brevemente hemos esquematizado necesita además de una partícula extra conocida como el bosón de Higgs. La necesidad de dicha partícula radica en el hecho de que todos los bosones intermediarios y partículas tendrían masa nula en el modelo con simetrías exactas. Sin embargo, la evidencia experimental requiere que al menos los bosones intermediarios de las interacciones débiles sean masivos para poder ajustar los datos observados, sin mencionar la clara observación cotidiana de que los protones, electrones y toda la materia que conocemos tienen masa. Para inducir esa masa se requiere que haya un rompimiento espontáneo de una parte del grupo de simetrías del modelo. El responsable de dicho rompimiento, y por ende el generador de la masa de los bosones w y z, es una partícula de espín cero que es precisamente nuestro llamado bosón de Higgs (p. 6).

       Sin embargo el citado Bosón de Higgs es lo que buscan con el proyecto referido por Barranco y Mondragón, dicho proyecto lo han llamado el Gran colisionador de hadrones (LHC), consideran los autores que:


Si el ME es la teoría última de las partículas elementales (si se descubre el Higgs tal y como se predice, con su valor esperado de masa y demás propiedades) entonces el LHC marcará el momento de encarar el verdadero problema de saber sí el conocimiento de los componentes básicos de la naturaleza permitirá construir un entendimiento del sistema total. Es decir, sí podremos entender el día a día del mundo con las leyes e interacciones fundamentales. Por otra parte, y siguiendo la filosofía de que aparecen propiedades nuevas e inesperadas cuando (p. 11).


Imagen N° 3. Interacción nuclear débil.

Interacción Nuclear Fuerte

        Una fuerza que puede mantener unido un núcleo en contra de las enormes fuerzas de repulsión de los protones, es realmente fuerte. Sin embargo, no es una fuerza como la electromagnética, y tiene un alcance muy corto. Yukawa modeló la fuerza fuerte como una fuerza de intercambio, en el que las partículas de intercambio son piones, y otras partículas más pesadas. El rango de una fuerza de intercambio de partícula, está limitado por el principio de incertidumbre. La interacción fuerte es la más intensa de las cuatro fuerzas fundamentales.

      Dado que los protones y los neutrones que componen el núcleo, se consideran que están hechos de quarks, y los quarks se consideran que se mantienen juntos por la fuerza de color, la fuerza fuerte entre los nucleones puede ser considerada como una fuerza de color residual. En el modelo estándar, por lo tanto, la partícula básica de intercambio es el gluón, que media las fuerzas entre los quarks. Dado que los gluones y los quarks individuales están contenidos dentro del protón o del neutrón, las masas que se les atribuyen, no se puede usar en las fórmulas de rango para predecir el rango de la fuerza. Cuando se ve algo que emerge de un protón o un neutrón, entonces debe ser por lo menos un par quark-antiquark, por lo que es entonces plausible que el pión como el meson más ligero, debería servir como un predictor del rango máximo de la fuerza fuerte entre los nucleones. Vídeo breve que habla de la fuerza interacción fuerte y débil :


       Algunas ideas e ilustraciones acerca de la fuerza nuclear fuerte se pueden observar en http://astroverada.com/_/Main/T_strong.html


        Los gluones son las partículas de intercambio de la fuerza de color entre los quarks, de forma análoga al intercambio de fotones en la fuerza electromagnética entre dos partículas cargadas. El gluón puede ser considerado como la partícula de intercambio fundamental, que subyace en la interacción fuerte entre los protones y los neutrones en un núcleo. Esa interacción de corto alcance nucleón-nucleón, puede ser considerada como una fuerza de color residual, que se extiende fuera de los límites de los protones o de los neutrones. Esa interacción fuerte fue modelada por Yukawa como consistente en un intercambio de piones, y de hecho, el cálculo del alcance del pión, fue útil en el desarrollo de nuestra comprensión de la fuerza fuerte.

     Los gluones son parejas de quark y antiquark (materia-antimateria) que surgen pareados del "mar de quarks" del que trasciende la existencia, materializándose mediante su interacción con el campo de Higgs, que reside en lo más profundo del tejido espacio-temporal del Universo.

     Las interacciones de los gluones son a menudo representadas por un diagrama de Feynman. Téngase en cuenta que el gluón genera un cambio de color en los quarks. Los gluones son de hecho considerados como bicoloreados, llevando una unidad de color y una unidad de anti-color como se sugiere en el diagrama de la derecha. El dibujo del intercambio de gluones, convierte un quark azul en uno verde y viceversa. El rango de la fuerza fuerte está limitado por el hecho de que los gluones interactúan unos con otros, así como con los quarks, en el contexto del confinamiento de quarks. Estas propiedades contrastan con la de los fotones, que no tienen masa y son de alcance infinito. El fotón no lleva consigo carga eléctrica, mientras que los gluones llevan "carga de color".

      Dentro de su alcance, los gluones pueden interactuar unos con otros, y pueden producir pares virtuales quark-antiquark. La característica de la interacción entre sí, es muy diferente de las otras partículas de intercambio, y plantea la posibilidad de existencia de colecciones de gluones denominado "glueballs" (bolas de gluones). El estado interno de un hadrón se considera compuesto de un número fijo neto de quarks, pero con una nube dinámica de gluones y pares de quarks-antiquarks en equilibrio.

      Los gluones surgen como pares, y como pares han de existir siempre, siendo, por tanto, indivisibles. Si se les intenta separar, una nube de gluones surgirá entre ellos, estirándose en forma de supercuerda elástica que, si llega a quebrarse, dará lugar a dos nuevos pares de quark-antiquark, surgidos de los dos trozos resultantes de la rotura de la cuerda.

      Los gluones, por tanto, ya que también son quarks, tienen carga de color. En realidad, al ser parejas de quarks son “bicolores”, es decir, son pequeños dipolos de color cuya carga es una mezcla de las tres cargas de color: rojo, verde, azul y forman parejas tales como: anti-rojo, anti-verde y anti-azul. Según esto, deberían ser entonces de nueve tipos: rojo-antiverde, rojo-antiazul, verde-antirrojo, verde-antiazul, azul-antirrojo, azul-antiverde, rojo-antirrojo, verde-antiverde y azul-antiazul, pero, por razones de simetría solo pueden darse ocho de esas uniones, pues las combinaciones tipo color-anticolor del mismo color no están permitidas, ya que darían un gluón neutro. Son ocho, por tanto, los gluones existentes.

Diagrama de Feynman.

Conclusiones

v  Los físicos estiman que todas las fuerzas conocidas son expresiones de tan sólo cuatro tipos de fuerzas o interacciones fundamentales entre las partículas.

v  La interacción gravitatoria provoca que cualquier clase de materia dotada de energía interaccione entre sí. Trabaja a grandes distancias y únicamente posee carácter atractivo.    De acuerdo con la hipótesis del modelo estándar, la interacción gravitatoria, es causada por una partícula hipotética denominada gravitón.

v  La interacción electromagnética influye en partículas con carga eléctrica. Tiene un alcance infinito. Es 10Ʌ36 veces más fuerte que la gravedad y describe muchos de los fenómenos cotidianos. El fotón es la partícula elemental causante de las manifestaciones cuánticas del fenómeno electromagnético.

v  La interacción nuclear fuerte, ocasiona la unión de los quarks para constituir los hadrones. Su efecto solamente es apreciable a longitudes muy cortas del orden de 10 Ʌ -15 metros. Según el modelo estándar, la partícula mediadora de esta interacción es el gluón. La carga de color es una propiedad de los quarks y los gluones que está asociada con su interacción fuerte.

v  La interacción nuclear débil, se asocia a un tipo de carga llamada sabor, que la tienen los quarks y los leptones. Esta fuerza es la responsable de los cambios de sabor en estas partículas, y la causante de que los quarks y leptones decaigan en partículas menos masivas, también es la responsable de la desintegración beta. Según el modelo estándar, la interacción débil es mediada por los bosones W y Z que son partículas muy masivas. Su intensidad es del orden de 10 Ʌ 25 veces la fuerza gravitatoria y su alcance es de 10 Ʌ -18 metros.

v  El propósito de la física teórica es conseguir describir las cuatro interacciones como manifestaciones de una sola fuerza, estableciendo una base matemática unificada que describa el comportamiento de las cuatro clases de interacciones fundamentales, conocida como la Teoría del Campo Unificado. El problema aparece al intentar cuantizar la gravedad, que resulta ser una teoría no renormalizable.

Referencias Bibliográficas


Barranco, J. y Mondragón, M. (2010). Habrá nueva física en el Gran Colisionador de Hadrones elementos; ciencia y cultura. Recuperado el 7 de julio del 2015 de http://redalyc.uaemex.mx/src/inicio/ArtPdfRed.jsp?iCve=29415909001

Berzosa, L. (2015). ¿Qué es la Fuerza Nuclear Fuerte? Quarks, Gluones y Piones. Recuperado el 7 de julio del 2015 de http://losrelatosdesamid.blogspot.com/2015/01/que-es-la-fuerza-nuclear-fuerte-quarks.html

Fuerzas de la naturaleza. Recuperado el 07 de julio del 2015 de www.gae.ucm.es/movilfis/material/fuerzas.pdf  

Moreno, J. (2013). Eliminan singularidad de agujero negro con LQG. Recuperado el 7 de julio del 2015 de http://neofronteras.com/?p=4122

Moreno, J. (2013). ¿Existen los gravitones masivos?. Recuperado el 7 de julio del 2015 de http://neofronteras.com/?p=4192

Olmo, M. Nave, R. (2015). Gluones. Recuperado el 7 de julio del 2015 de http://hyperphysics.phy-astr.gsu.edu/hbasees/particles/expar.html

Olmo, M. Nave, R. (2015). La Fuerza Fuerte. Recuperado el 7 de julio del 2015 de http://hyperphysics.phy-astr.gsu.edu/hbasees/particles/expar.html

Olmo, M. Nave, R. (2015). La Fuerza Electromagnética. Recuperado el 7 de julio del 2015 de http://hyperphysics.phy-astr.gsu.edu/hbasees/particles/expar.html

Sears, F., Zemansky, M., Young, H. y Freedman, R.  (2009). Física universitaria, con física moderna. Decimosegunda edición. D.F., México: Pearson Educación.

Tipler, P. y Mosca, G. (2015). Física para la ciencia y la tecnología. Sexta edición. Barcelona, España: Editorial Reverté.

Zamarro, J. (s.f). Interacciones: Gravitatoria y Electromagnética. Recuperado el 7 de julio de http://webs.um.es/jmz/optica/documentos/I_interacciones.pdf